El Covid 19 ha sido el principal causante del freno en el potencial crecimiento que la restauración tenía en los últimos cinco años.
Esta crisis ha provocado pérdidas millonarias solo entre el 15 de marzo y el 30 de junio.
La principal causa de esta caída de la facturación ha sido el descenso de la afluencia de consumidores como consecuencia directa de las nuevas medidas y otras restricciones del estado de alarma.
Además de esta reducción del consumo, la crisis ocasionada también ha condicionado la estructura del sector hostelero.
En esta nueva situación, algunos trabajadores han mostrado su capacidad de adaptarse al nuevo contexto, agilizando procesos, flexibilizando sus negocios y acelerando la integración de las nuevas tecnologías.
Claves para la recuperación del sector hostelero
A pesar de que una parte de los empresarios del sector hostelero creen que la situación mejorará en 2021, hay otra gran parte que no espera recuperar el volumen de actividad que había antes del Covid hasta 2022. Algunos incluso posponen ese momento hasta al menos un año después.
Las cadenas de restauración están experimentado cambios en el servicio para llevar (take away) y ven esta tendencia como una buena oportunidad para su negocio. Las cadenas de restauración esperan que el take away crezca a una mayor velocidad.
Además de una mayor diversificación de la actividad, la recuperación del sector de la restauración se impulsará con la digitalización y la transformación de los modelos de negocio para orientar las marcas a sus clientes.
Los hábitos y preferencias del consumidor están cambiando actualmente. El consumidor es más digital, más selectivo y más restrictivo en el gasto; se siente más vulnerable y está más preocupado por su salud; tiene una mayor preferencia por lo local y es más exigente con las marcas en cuanto a su transparencia y compromiso con la sostenibilidad y su impacto social.
Los modelos de negocio de las empresas de restauración tendrán que alinearse y apoyarse en la tecnología. El cliente debe ser el centro de todas sus decisiones.
En este marco actual, nuestro concepto Pizzadoor toma especial relevancia ya que permite a las pizzerías vender sus pizzas 100% artesanales de forma completamente automática aumentando sus beneficios y extenderse a otras zonas de la ciudad sin necesidad de realizar una gran inversión. Por otra parte, para el cliente es una forma sencilla de obtener una pizza aunque el restaurante esté cerrado.
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